TEXTO "LA ALEGRÍA", de Almudena Grandes (modificado):
"Lo peor ni siquiera es el cinismo. Invocar la inviolabilidad del hogar o la
edad del hijo de la vicepresidenta del Gobierno para condenar los escraches,
implica consecuencias más graves. Estas declaraciones explicitan que la
sensibilidad de quienes se sienten agredidos se limita a los miembros de su
propio grupo. Así, el hogar de los desahuciables se puede, y se debe, violar
con una ley injusta en la mano, y sus hijos, igual que los de los proletarios
del siglo XIX, no cuentan como bebés. Para el Gobierno del PP, la exclusión
social no es un riesgo, sino un insignificante daño colateral del que nadie
debe hacerse responsable.
No se
podía hacer nada, decían, pero resulta que sí se puede. Ha muerto la política,
decían, y miren por dónde, acaba de resucitar. Todos son iguales, decían, y sin
embargo han dejado de serlo. Fátima Báñez le mete un hachazo a las pensiones
por decreto mientras sus portavoces critican que Elena Cortés escoja la vía del
decreto para atacar a bancos y especuladores. Lo peor no es el cinismo. Lo
mejor es que una Administración haya sabido reaccionar para sacarle los colores
de la vergüenza a todas las demás. Y el fin de la cantinela del voto útil. Y la
alegría de encontrar en la unidad de la izquierda una puerta abierta hacia el
futuro".